5.12.07

¿La muerte de la triple amenaza?

Imágenes como la de la derecha, en la que aparece el nugget Alex English (ojo, máximo anotador de los 80 por encima de Bird, Jordan, Blackman, Dantley o Drexler), por desgracia, cada vez pueden verse menos en las canchas de baloncesto ya sea en el deporte formativo o en la élite. Entiendo que los jugadores de baloncesto actuales son mucho mejores a nivel físico que hace unos años y que este deporte está sumido, irremediablemente, en un proceso de aceleración y espectacularidad que no tiene perspectivas, a corto plazo, de finalizar.
Pero la velocidad, que tiende a ser atractiva para la gran mayoría de jugadores, entrenadores y espectadores, tiene sus elementos negativos: cada vez prima más la ejecución rápida de un determinado movimiento por encima de la interpretación de lo que está sucediendo en la pista. El elemento al que hago referencia es el de la triple amenaza (veáse el tener una posición con el balón en las manos desde la cual se pueda generar una acción de dribling, tiro o pase con cierto grado de peligro para la defensa). ¿Cuantas veces hemos visto a un jugador realizar una arrancada rapidísima y perfecta en cuanto a ejecución estrellarse contra una defensa? ¿Nunca habéis visto a un jugador elevarse para lanzar con un correcto gesto técnico y encontrarse que tiene un defensa que le impide en el aire ejecutar el tiro? A esto hago referencia. Cada vez tenemos jugadores más completos y físicamente mejores pero que en la mayoría de casos son incapaces de adaptar sus aptitudes al rapidísimo ritmo de juego actual...eso, y que cada vez los entrenadores estamos descuidando más el factor de la triple amenaza, ese segundo que el jugador debe pasar con el balón en las manos mirando el campo para escoger la situación adecuada, ese segundo que la mayoría de la gente prefiere invertir en un tiro, un pase o una arrancada veloz independientemente de la calidad y precisión de la decisión antes que en el microanálisis de lo que está sucediendo para tomar la elección adecuada al contexto.
Necesitamos volver a potenciar esto. No se trata de retener la fluidez el balón si no trabajar desde la base para que nuestros jugadores sean capaces de interpretar lo que sucede en cancha con el balón en las manos, para que sean igual de peligrosos para la defensa, y en definitva, para que podamos ver a más jugadores como Papaloukas, por ejemplo, poblando nuestras canchas para regocijo de todos.

1 comentario:

Anónimo dijo...

DEar Percal.
The music dindn´t die in the 70´s.There are a lot of good music in this days,per example mederski,martin & wood,congratulations
SINPHO 2